Keter nació en una conversación sentadas en el piso de un baño jugando con cuarzos.
Es ahí donde dimos vida a la idea que se convirtió en este proyecto del que estamos tan orgullosas.
Somos firmes creyentes del poder que las vibraciones tienen en nuestro cuerpo, en nuestro espíritu y en nuestro entorno, y es por eso que quisimos crear productos que puedan ser utilizados de diferentes maneras por diferentes personas, dejando que cada quien lo haga suyo y cree su propia experiencia de sanación.
Brindar productos sanadores se transformó en facilitar experiencias experiencias espirituales y nos enamoramos de la idea de estar en contacto y compartir en comunidad el amor por estas prácticas.
Una cosa lleva a la otra y nace Casa Keter, un espacio que creamos para seguir compartiendo experiencias de luz y conectando con personas que están en el camino de expandir su conciencia.
Nuestra intención es facilitar un espacio y comunidad para ser alumnos y maestros, en donde todos podamos compartir nuestra sabiduría y seguir expandiendo nuestra luz.
Con mucho amor,
Jimena y Valeria